El papa Francisco se reunió en privado ayer miércoles con el presidente ruso Vladimir Putin en el Vaticano, y aprovechó la conversación para hacer un llamado a que se realice un esfuerzo sincero para llevar la paz a Ucrania.
El reverendo Federico Lombardi, vocero del Vaticano, dijo que su encuentro se centró en el conflicto de Ucrania y en Medio Oriente, donde el destino de la minoría cristiana inquieta a la Santa Sede.
Putin se reunió horas antes con el primer ministro italiano Matteo Renzi en Milán y llegó una hora tarde a la reunión en el Vaticano, la segunda con Francisco desde que éste se convirtió en sumo pontífice en 2013.
Lombardi dijo que el papa recalcó la necesidad de “comprometerse uno mismo en un gran y sincero esfuerzo” para llevar la paz a Ucrania, a través del diálogo e implementación de los acuerdos de Minsk.
Francisco urgió además a que se permita acceso a la ayuda humanitaria. Estados Unidos, mediante canales diplomáticos, había exhortado al Vaticano a utilizar la audiencia papal privada como una ocasión para unirse a Occidente para condenar las acciones de Moscú en Ucrania.
Ayer miércoles, el embajador estadounidense en la Santa Sede, Kenneth Hackett, dijo que a su país le agradaría ver que el Vaticano externara su preocupación por lo que sucede en Ucrania cuando recibiera a Putin. “Creemos que podría decirle algo más sobre las preocupaciones por la integridad territorial, ese tipo de cosas”, dijo Hackett a la prensa. “Parece ciertamente que Rusia apoya a los insurgentes.
Y ciertamente parece que hay soldados rusos dentro de Ucrania. Ésta es una situación muy seria”.